22 de abril de 2010

Concentración en los niños mediante la relajación. "La relajación" II



PROGRAMA PARA FAVORECER LA CONCENTRACIÓN EN LOS NIÑOS PEQUEÑOS A TRAVÉS DE LA RELAJACIÓN

Fase 2:
·      Procedimiento de relajación muscular (Koeppen)
   Cada una de ellas será introducida en una sesión, no pasando a la siguiente hasta que los alumnos no estén suficientemente entrenados en la anterior.
    Cuando ya los niños tengan dominada la respiración abdominal, pasar a la siguiente fase de
RELAJACIÓN: Explicarles que vamos a hacer unos ejercicios muy divertidos que van a ayudarles a que su cuerpo esté más tranquilo.
                                            
Sentados, hacer una serie de respiraciones abdominales para calmarse. A continuación se procede a los ejercicios de tensión-distensión por grupos.
Cada día se puede trabajar un grupo diferente, incluyendo el trabajado el día anterior hasta completar la serie:

MANOS BRAZOS: (3 veces con cada mano/brazo)

Imagina que tienes un limón en tu mano izquierda. Ahora trata de exprimirlo, trata de exprimirle todo el jugo. Siente la tensión  en tu mano y brazo mientras lo estás exprimiendo.
Ahora déjalo. Fíjate como están ahora tus músculos, ahora están relajados. Coge ahora otro limón y trata de exprimirlo. Exprímelo más fuerte que lo hiciste con el primero. Ahora tira el limón y relájate. Fíjate que bien se sienten tu mano y tu brazo cuando están relajados. Una vez más, toma el limón en tu mano izquierda y exprímele todo el zumo, no dejes ni una sola gota, exprímelo fuerte. Ahora relájate y deja caer el limón.
(Repetir el mismo procedimiento con la mano y el brazo derechos)

BRAZOS Y HOMBROS: (5 VECES)

Ahora vamos a imaginarnos que eres un gato muy perezoso, y quieres estirarte. Estira (extiende) tus brazos frente a ti, levántalos ahora sobre tu cabeza y llévalos  hacia atrás. Fíjate en el tirón que sientes en tus hombros. Ahora deja caer tus brazos a tu lado. Muy bien. Vamos  a estirar otra vez Estire los brazos frente a ti, levántalos sobre  tu cabeza y tire de ellos hacia atrás,  fuerte. Ahora déjalos caer. Muy bien. Fíjate como tus hombros se sienten ahora más relajados.  
Ahora una vez más, vamos a intentar estirar los brazos, intenta tocar el techo esta vez. De acuerdo. Estira los brazos enfrente a ti, levántalos sobre tu cabeza y tira de ellos hacia atrás, fíjate en la tensión que sientes en tus brazos y hombros. Un último estirón ahora muy fuerte. Deja caer los brazos, fíjate que bien te sientes cuando estás relajado.

HOMBROS Y CUELLO: (4 VECES)

Ahora  imagina  que eres una tortuga. Imagínate  que estas sentado encima de una roca en un tranquilo estanque relajándote al calor del sol, te  sientes tranquilo y seguro allí. Oh! de repente sientes una sensación  de peligro. Vamos! mete la cabeza en tu concha: Trata de llevar tus hombros hacia tus orejas, intentando poner tu cabeza metida entre tus hombros, mantente así, no es fácil ser una tortuga metida en su caparazón. Ahora el peligro ya pasó, puedes salir de tu caparazón y volver a relajarte a la luz del cálido sol, relájate y siente el calor del sol. Cuidado! Más peligro, rápido, mete la cabeza en tu casa , tienes que tener la cabeza totalmente metida pare poder protegerte, O.K. ya puedes  relajarte, saca la cabeza y deja que tus hombros se relajen. Fíjate que te sientes mucho mejor cuando estás relajado que cuando estás tenso. Una vez más. Peligro! esconde tu cabeza, lleva los hombros hacia tus orejas, no dejes que ni un solo pelo de tu cabeza quede fuera de tu concha. Mantente dentro, siente la tensión  en tu cuello y hombros. De acuerdo, puedes salir de tu concha, ya no hay peligro. Relájate ya no va a haber más s peligro, no tienes nada de que preocuparte,  te sientes seguro, te sientes bien .

MANDÍBULA. (3 VECES)

Imagínate que tienes un enorme chicle en tu boca, es muy  difícil de masticar, está muy duro. Intenta morderlo, deja que los músculos de tu cuello te ayuden. Ahora relájate, deja tu mandíbula floja, relajada, fíjate que bien te sientes cuando dejas tu mandíbula caer. Muy bien, vamos a masticar ahora otro chicle, mastícalo fuerte, intenta apretarlo, que se meta entre tus dientes. Muy bien, lo estás consiguiendo. Ahora relájate, deja caer la mandíbula, es mucho mejor estar así que estar luchando con ese chicle. O.K., una vez más, vamos a intentar morderlo. Muérdelo lo más fuerte que puedas, más fuerte, muy bien, estas trabajando muy bien. Bien ahora relájate. Intenta relajar tu cuerpo entero, intenta quedarte como flojo, lo más flojo que puedas
                                              
CARA Y NARIZ Y FRENTE: (2 veces)

Bueno, ahora viene volando una de esas molestas moscas y se ha posado en tu nariz, trata de espantarla pero sin usar tus manos. Intenta hacerlo arrugando tu nariz. Trata de hacer tantas arrugas con tu nariz como puedas. Deja tu nariz arrugada, fuerte. Bien! Lo has conseguido, la mosca se ha ido, ahora puedes relajar tu nariz, oh! Por ahí vuelve esa pesada mosca, arruga tu nariz con fuerza, lo más fuerte que puedas. O.K. se ha ido nuevamente. Ahora puedes relajar tu cara. Fíjate que cuando arrugas tan fuerte la nariz tus mejillas, tu boca, tu frente y hasta tus ojos te ayudan y se ponen tensos también. Oh1, otra vez regresa esa vieja mosca, pero esta vez se ha posado en tu frente. Haz arrugas con tu frente, intenta cazar la mosca con tus arrugas, fuerte. Muy bien, ya se ha ido para siempre, puedes relajarte, intenta dejar tu cara tranquila, sin arrugas. Siente como tu cara está ahora más tranquila y relajada.

ESTOMAGO (3 veces)

Imagina que estás  tumbado sobre la hierba, oh! mira, por ahí  viene un elefante, pero él  no está  mirando por donde pisa, no te ha visto, va a poner un pie sobre tu estómago, no te muevas! no tienes tiempo de escapar. Trata de tensar el estómago poniéndolo duro, realmente duro, aguanta así , espera, parece coma si el elefante se fuera a ir en otra dirección. Relájate  deja el estómago blandito y relajado lo más que puedas. Así te sientes mucho mejor. Oh! por ahí vuelve otra vez. ¿estás preparado? Tensa el estómago fuerte, si el te pisa y tienes el estómago  duro no te hará daño. Pon tu estómago duro como una roca. O.K. parece, que nuevamente se va.
Puedes relajarte. Siente la diferencia que existe cuando tensas el estómago  y cuando lo dejas relajad. Así  es como quiero que te sientas, tranquilo y relajado. No podrás creerlo por ahí vuelve el elefante y esta vez parece que no va a cambiar de camino, viene derecho hacia ti.  Tensa el  estómago  Ténsalo fuerte, lo tienes casi encima de ti, pon duro el estómago, está poniendo una pata encima de ti, tensa fuerte. Ahora ya parece que se va, por fin se aleja. Puedes relajarte completamente, estar seguro, todo está bien, te sientes seguro, tranquilo y relajado
           
(2 veces)

Esta vez vas a imaginarte que quieres pasar a través de una estrecha valla en cuyos bordes hay unas estacas. Tienes que intentar pasar y para ello te vas a hacer delgado, metiendo tu estómago hacia dentro, intentando que tu estómago toque tu columna. Trata de meter el estómago todo lo más que puedas, tienes que atravesar esa valla. Muy bien! Ahora relájate y siente como tu estómago está ahora flojo. Muy bien, vamos a intentar nuevamente pasar a través de esa estrecha valla. Mete el estómago, intenta que toque tu columna, déjalo realmente metido, muy metido, tan metido como puedas, aguanta así,  tienes que pasar esa valla, Muy bien, has conseguido pasar a través de esa  estrecha valla sin pincharte con sus estacas. Relájate ahora, deja que tu estómago vuelva a su posición  normal.  Así  te sientes mejor. La has hecho muy bien.

PIERNAS Y PIES:  (2 veces)

Ahora imagínate que estás parado descalzo y tus pies están dentro de un pantano lleno de barro espeso. Intenta meter los dedos del pie dentro del barro. Probablemente necesitarás  tus piernas para ayudarte a empujar. Empuja hacia dentro, siente coma el  lodo se mete entre tus pies. Ahora salte fuera y relaja tus pies. Deja que tus pies se queden como flojos y fíjate que bien estás así. Te sientes bien cuando  estás  relajado. Volvemos dentro del espeso pantano. Mete los pies dentro, lo más  dentro  que puedas. Deja que los músculos de tus piernas te ayuden a empujar tus pies. Empuja fuerte, el barro cada vez está más duro. O.K. salte de nuevo y relaja tus piernas y tus pies. Te sientes mejor cuando estás relajado. No tenses nada. Te sientes totalmente relajado.
Continuará...

1 comentario:

  1. Te agradezco mucho las relajaciones y la meditación de la estrella que has compartido, me han gustado mucho y espero que sigas compartiendo este tipo de actividades para niños.

    Muchísimas gracias, me ha encantado tu blog. saludos!

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